La humanidad detrás del bisturí del
Dr. Gabriel Pérez

Aunque creció en una familia sin tradición médica, la conexión con el mundo de la salud comenzó muy temprano para Gabriel Pérez Díaz. Su fascinación por el cuerpo humano y el deseo de curar enfermedades lo llevaron a elegir la medicina como su camino.

Su formación en la Universidad Central de Venezuela fue solo el comienzo de una trayectoria llena de experiencias enriquecedoras. Las pasantías rurales en Amazonas y el Hospital Periférico de Pariata, en La Guaira, lo enfrentaron con las necesidades de salud en diferentes regiones del país.

Tras especializarse en cirugía general, hizo un curso de ampliación en cirugía de trauma en el Hospital Domingo Luciani de El Llanito: “Fue un posgrado bastante duro, sobre todo físicamente. ¡Dormía 3 horas diarias y hasta choqué el carro! Pero, a la vez, fue una etapa llena de aprendizaje y crecimiento. Fue el año en que me casé, empecé mi familia y tuve a mi hijo, que es la motivación de mi vida”.

Su vocación, posteriormente, dio un giro hacia la oncología quirúrgica. Ingresó al Instituto Oncológico Luis Razetti, adscrito a la UCV… «Creo que es una rama bastante interesante, no solamente es saber operar, requiere de muchos criterios”. Explica el Dr. Pérez que el cáncer lo retó a combinar la precisión técnica con la sensibilidad humana: «Lo que más disfruto de mi trabajo es la satisfacción de curar a mis pacientes, ofrecerles las mejores expectativas de vida y la mejor calidad de vida también”.